He preparado recientemente con toda clase de lujo, un serio documental sobre nuestras danzas. Las danzas en Canarias han estado en numerosas ocasiones, casi escondidas. Algo así como si nos avergonzáramos de ellas. Son manifestaciones, que hablan de nosotros y nos describen con muchísima generosidad.
Muchas horas he compartido con la familia González, en Tegueste. Numerosas, también, las fiestas y romerías que hemos compartido. Incluso en una ocasión, con un invitado de honor para que le ofreciera una malagueña a San Marcos, en la plaza del mismo nombre, hable con ellos para que, en medio de un programa emblemático como "La Bodega de Julián", acompañaran en breve recorrido y dentro de las fiestas a su patrono, San Marcos. La familia González, es la mantenedora de esta tradición de la Danza de las Flores. Una danza distinta, de pasos rítmicos y rígidos palos adornados con flores, que si bien en sus inicios fueron de flores poco a poco el plástico es el encargado de vestirla. Llama la atención su vestimenta y su gorro, decorado o coronado con vistosas plumas de faisán, de avestruz o de gallos ingleses.
Pero hay otras muchas a las que solo me voy a referir, pasando por encima de ellas, como es la Danza de San Padro, en Güimar y a la cual, he tenido la ocasión de grabar en distintas ocasiones para Televisión Española en sus capítulos del Pueblo Canta o en Televisión Canaria. Son dos danzas la de San Pedro de arriba y la de San Pedro de abajo. Aquí en tamborilero hace sonar el tambor y el pito a un tiempo y camina con la danza estando fuera del tendido de cintas que los danzantes tejen y destejen, al ritmo del Tajaraste.
La danza herreña, vibrante casi seña de identidad de todas las manifestaciones procesionales. Es una danza electrizante que simula el movimiento en sus idas y venidas con el andar de un ganado lanar. Son incansables, con sus saltos, con su trepidante ritmo.
Foto: http://ezpalak3.wordpress.com/
Y la del día 12 de octubre, en Chimiche, La Danza de Varas... esta danza procede de la región catalana y quedo aquí desde hace muchísimos años. Se danza, acompañando a la Virgen del Pilar, patrona de la Guardia Civil. Sus varas están cuidadosamente adornadas con cintas de papel seda, que días antes todos, sin exclusión, confeccionan. Los gorros de los danzarines y parte de la vestimenta también usan el mismo material. Aquí los instrumentos suelen ser de cuerdas y castañuelas y evolucionan los danzantes jugando con las varas que llevan uniéndolos de mano en mano. Una veces saltan por encima de ellas y otras le sirven de puente para pasar por debajo... el ritmo es un repetitivo tajaraste.
Así que si alguien quiere presenciarlas en estado puro el día doce, a las 13h, en Chimiche, en el sur de la isla de Tenerife, tienen la ocasión de quedar admirados con tanta belleza y sentimiento.
La próxima ocasión, hablare más en profundidad de la evolución de nuestras danzas.
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