Había que buscar un hueco entre nuestra apretada agenda para
estar, a la hora en punto, en una cita ineludible. Cuatro compañer@s, Totoyo Millares,
Paco Montesdeoca, Conchi Vera y a título póstumo Sergio Correa, recibían, del
Ayuntamiento de Telde, el justo premio por su dilatada trayectoria profesional.
El acto, uno de los tantísimos del amplio programa de la señalada fiesta de
nuestra autonomía, se anticipó, decisión acertada, para evitar la coincidencia
con otros eventos de hondo calado popular.
Y acompañado de Lydia Díaz, llegamos a temprana hora para saludar a
los amig@s que habían acudido al acto. El Teatro Juan Ramón Jiménez, con un
lleno de envidia, quedó corto para albergar a las más de 500 asistentes.
Al reconocimiento a “los defensores de la cultura popular”, con asistencia de
las primeras autoridades de la zona, estuvo presentado por el locutor Antonio
Betancor. Tras la intervención de la Banda de Telde que interpretó “Soy de
aquí”.
Seguidamente, intervino Daniel Martín, Concejal Delegado de Cultura y Ocio
quien señaló: “El único motivo, el sentido de este acto es reconocer,
distinguir y agradecer a quienes han dedicado su vida, su tiempo y su trabajo a
aquellas personas sabedoras que Canarias es
nuestra razón de ser”…
Le siguió en el uso de la palabra la alcaldesa de Telde, María del Carmen
Castellano que estuvo acompañada de Guillermo Reyes, Pablo Rodríguez y Daniel
Martín.
Conchi Vera, como directora de la revista Guía Histórica de la Ciudad de Telde.
Conchi, agradeció el distingo, poniendo el dedo en la llaga de lo difícil que
resulta, en los tiempos que corren mantener una revista sin los apoyos de los
empresarios. Entre los galardonados, se excusó la ausencia de Totoyo Millares,
que estaba actuando en la isla de La Gomera y que recibió la distinción su hija
Amparo Millares y Paco Montesdeoca “el hombre del tiempo” que, tampoco pudo
estar presente por motivos de salud de su suegro, delegó en el compañero de
fatigas en Radio Atlántico, José Florido…
El momento emotivo sucedió cuando Margot García, esposa de recientemente
fallecido Sergio Correa, hizo uso de la palabra para agradecer el gesto.
“quiero agradecer, desde lo más profundo de mi llama, esta distinción. Sergio,
fue un hombre que amó a Canarias como el que más… No solo amo la tierra.
También la modeló con sus trabajos de alfarería. Hoy, no lo dudo, de estar aquí,
sería inmensamente feliz porque esta placa huele a pueblo, un pueblo que es
quien le distingue y le honra”. Visiblemente emocionada, recibió una larguísima ovación.
Recuerdo, cuando la
Bodega de Julián, inició su andadura, le hice un encargo al amigo Sergio para agradecer
a grupos, solistas e invitados su colaboración en el programa. Sergio,
inspirado en el ídolo de Tara, me presentó un trabajo en el que el ídolo de la
fertilidad, evolucionaba hasta convertirse en timplista. Es desde ese momento,
el trabajo de Sergio se convirtió en el símbolo de La Bodega de Julián.
El acto culminó con la actuación de música y cantos de la tierra.
ALFREDO AYALA OJEDA
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