* EL INICIO DE FIESTA DEL CARNAVAL TRADICIONAL

Hace algún tiempo, cuando reinicié esta última andadura de Tenderete, con muchísimas penurias económicas – empezaban las vacas flacas en Televisión Española-. Tenía en antena, semanalmente, tres programas emblemáticos:”Senderos Isleños”, “Bolero” y “Tenderete”. Estaba, por ese entonces como directora de Televisión en Canarias, la periodista Piedad Alarcón. Yo, con el excelente realizador Tony Santana, estando en la Playa de Las Canteras, en plenos carnavales. Se acercó a saludarnos, acompañando a la directora "el Príncipe de la noche", quien al vernos le dijo: “Piedad, debes recuperar Tenderete y añadió. Aquí tienes, refiriéndose a nosotros, quienes deben hacerlo”. A la mañana siguiente, nos citó en su despacho y tras argumentarnos la carencia de dinero, nos dijo que preparáramos un presupuesto para poner en marcha el programa.

El presupuesto, solo contaba con unas 700.000 pesetas. De ello, había que pagar al presentador, “la parranda del millo”, los enyesques para público, auxiliares, etc. Nos pusimos en marcha, pidiéndole favores a todo el que se ponía a tiro… Se habló con Fred Olsen para obtener pasajes gratis de los grupos o solistas que venían de Tenerife y con Binter para que nos hiciera un precio, para los que venían de otras islas.

El programa, como siempre, respondió bien de audiencia y, al desaparecer “Bolero”, se fue más generoso. Al poco se acercaron las fechas de carnaval y pensamos en hacerle un canto al carnaval tradicional eso que casi queda a trasmano de todos. El carnaval íntimo, el que retrataba a nuestros mayores. Si poco a poco se habló con la Parranda Cuasquías para que nos hiciera una panorámica musical de nuestro carnaval… Ya vienen los carnavales/ por la punta de la isleta/ el que no tenga pañuelo/ que se ponga una pañoleta, hasta finalizaron la llegada en la cuaresma: Ya se van los carnavales/ cosa buena poco dura/ empieza la cuaresma/el carnaval de los curas… y en medio de tanto jolgorio música, con himno de carnaval de Sindo Saavedra, pues incluimos unas pinceladas de otros municipios o islas.

Yo había vivido con un grupo de palmeros, en la entrada de la calle Triana, en Las Palmas de Gran Canaria, una minúscula batalla de polvos de talco. Me pareció lógico invitarlos al programa para que lucieran sus blancas vestimentas, sus encajes y pamelas… Era pocos, no llegaban a quince pero ponerlos en el reducido plató de Tenderete, daban el pego. Así que los invité. Venían con todos los preparativos: maletas, dólares, leontilla y unos cuantos kilos de polvos de talco.

Se prepararon algunos pasillos por donde pudieran moverse, el programa resultó todo un éxito. Verdad es que nunca pensé en recrear ni copiar los auténticos indianos palmeros. Solo, con estos palmeros afincados en Gran Canaria, dar una pincelada.

Al año siguiente, aquel puñado de palmeros que tiraban polvos de talco, se convirtieron en legión y el recorrido desde el Parque de San Telmo hasta La Alameda, se ha convertido en acto esperado y multitudinario.

Hoy, los propios interesados, conocen o divulgan la fiesta del Carnaval tradicional aparcando ese otro inicial de la fiesta de los indianos en Las Palmas de Gran Canaria.

ALFREDO AYALA OJEDA